El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un tema que hoy en día está teniendo mucha popularidad, no solo en las escuelas con lxs niñxs, sino también con adultxs.
Después de la pandemia y la atención que le prestamos al cuidado de la salud mental, se viralizó en redes sociales el TDAH en todas las edades y cómo esta condición marca la vida de las personas que la padecen, muchas veces siendo incomprendidas o encasilladas en un mismo tipo.
Hoy platicaremos sobre el TDAH, desde su descubrimiento hasta las terapias alternativas para su tratamiento.
¿Qué es el TDAH?
El TDAH es un trastorno neuropsiquiátrico que afecta tanto a niñxs como a adultxs. Sus principales características son: problemas de atención, hiperactividad e impulsividad.
Estos síntomas muchas veces hacen que la persona con TDAH tenga poca concentración, poco control de sus impulsos y falta de organización o de ejecución de tareas "simples" a la vista de una persona neurotípica.
(Te invitamos a leer el blog de neurodiversidad aquí)
Descubriendo el TDAH
El TDAH fue reconocido por primera vez en 1902 por el médico británico Sir George Still, quien observó comportamientos inusuales en niños. Sin embargo, no fue hasta la década de 1960 que se comenzó a comprender mejor y diagnosticar con mayor frecuencia.
Durante estas décadas, se realizaron estudios clínicos, digamos un poco más sistemáticos sobre los síntomas que hoy en día se asocian con el TDAH. Los investigadores comenzaron a identificar patrones de comportamiento en niños que incluían falta de atención, hiperactividad e impulsividad.
En los últimos años se ha llegado a entender de mejor manera el rango de patrones que conforman al TDAH, con estudios más precisos y terapias personalizadas para entender cada aspecto del mismo.
¿Cómo se ve el TDAH?
El TDAH siempre se ha ligado a la falta de atención, es un síntoma que lleva a la persona a ser poco organizada, que realiza sus tareas de forma parcial, también llegan a cometer errores sencillos, pero que pueden tener consecuencias grandes. Suelen perder objetos de valor, como juguetes, ropa, celulares o llaves. Curiosamente, en algunos casos llegan a ser perfeccionistas, intentando compensar su parte despistada.
Para poder concentrarse, necesitan aislarse de cualquier estímulo, por ejemplo, para estudiar, muchas veces necesitan estar en absoluto silencio.
También se expresa con el famoso multitasking. Para evitar el aburrimiento, las personas con TDAH empiezan varias tareas al mismo tiempo, pero rara vez las terminan.
Cuando quieren terminar un proyecto, buscan estados de excitación que les permitan concentrarse hasta finalizarlo, pero casi siempre dejan las cosas para el último momento.
El TDAH no tiene edad
El TDAH se diagnostica comúnmente en la infancia, generalmente entre los 6 y los 12 años, en algunos casos los síntomas pueden manifestarse desde los 3 años y pueden continuar en la edad adulta, muchas veces niñxs no diagnosticados en la infancia descubren su TDAH siendo adultxs.
Tipos de TDAH
Cuando escuchas TDAH, siempre piensas en una persona distraída, pero realmente existen varios tipos de este trastorno.
TDAH Predominantemente Inatento:
Las personas con este tipo, tienen problemas de atención y organización sin hiperactividad.
TDAH Predominantemente Hiperactivo-Impulsivo:
Se manifiesta en las personas principalmente con hiperactividad e impulsividad.
TDAH Combinado:
Combina síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad.
¿Cómo saber si es TDAH?
El diagnóstico del TDAH, sí o sí lo tiene que determinar un profesional de la salud mental (como un psicólogo, un neurólogo o un psiquiatra), recopilando la información detallada sobre la historia del paciente y sus síntomas. Se realiza un historial para conocer la duración y la gravedad de los síntomas, también cualquier factor desencadenante y se toman en cuenta los antecedentes médicos y familiares.
Lxs profesionales utilizan escalas estandarizadas de evaluación de síntomas, como el famoso Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, que es el manual que les da criterios específicos para diagnosticar el TDAH.
También la observación de la persona en diferentes contextos, como en la escuela o en el trabajo, sirve para evaluar su comportamiento y puede ayudar a confirmar el TDAH.
Es importante siempre destacar que el diagnóstico del TDAH se realiza por un profesional, no por medio de tests en internet o autodiagnóstico.
Si crees tener TDAH, puedes consultar a unx psicólogx que te orientará durante todo el proceso, sea el diagnóstico final o uno distinto.
¿Tiene tratamiento?
Sí, el TDAH, como muchas neuropatías hoy en día son tratadas y a veces controladas de distintas formas y con tratamientos de acuerdo a cada caso.
El TDAH principalmente se trata con:
Medicamentos psiquiátricos
Terapias cognitivo-conductuales.
Apoyo educativo para desarrollar habilidades de organización y gestión del tiempo.
Terapias alternativas de consciencia plena
El TDAH, al igual que otras neurodivergencias, muchas veces es ignorado ya que no es un trastorno que aparentemente afecte al desarrollo psico-social de la persona que lo padece, sin embargo gracias a la ola de información sobre salud mental, cada vez conocemos más relatos de personas que nos cuentan cómo es vivir con TDAH, lo complejo y frustrante que llega a ser la poca empatía del sistema neurotípico, e incluso nos comparten sus rutinas diarias y tips para llevar mejor su vida diaria con TDAH.
En makoto nos dimos a la tarea de recopilar información y hacer una lista de tips para personas con TDAH que puede ayudarles a mejorar su calidad de vida.
Hoy en día, el TDAH es uno de los trastornos psiquiátricos más estudiados y diagnosticados en niñxs y adultxs en todo el mundo. Su historia refleja la evolución de la psiquiatría y la psicología en la comprensión y el abordaje del tratamiento de las neurodivergencias.
El diagnóstico y la intervención adecuada pueden hacer toda la diferencia en la calidad de vida de las personas que lo padecen.
Si padeces TDAH o conoces a alguien con esta neurodivergencia recuerda que la empatía siempre es lo más importante, busca redes de apoyo ¡o sé una!
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